Aunque la caída de las hojas no ha empezado, sí la bajada de temperatura y en algunas zonas las lluvias. Lenta pero gradualmente el otoño se implanta sobre el territorio y va esculpiendo el paisaje de ocres, verdes y naranjas. Como no podía ser de otra manera, los animales salvajes cambian sus hábitos en función a todos estos fenómenos; algunos se van hacia el sur, otros vuelven a sus cuarteles de invernada y la comida o el alimento es buscado en otros lugares. Descorchamos la época de recoger, de pertrecharse para el invierno y los buitres y otras especies necrófagas como los Milanos reales nos visitan procedente del Norte de Europa. En el punto de alimentación de carroñeras que AMUS gestiona con el Ayuntamiento de Oliva de la Frontera se pueden apreciar fotogramas de una vida salvaje de ciclos y coincidencias: buitres negros de este año que salen por primera vez de sus colonias en las que nacieron, buitres leonados también juveniles en dispersión y Milanos reales huidos de las nieves de Europa.
AMUS gestiona tres puntos de alimentación para especies necrófagas en Extremadura. Los de Oliva de la Frontera y Valencia del Mombuey son mantenidos con los Ayuntamientos de ambas localidades. En muy pocos días os lanzaremos nuevas propuestas de ocio vinculadas a la conservación y divulgación de estas especies y estas zonas del suroeste ibérico.
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