Desaviniendo los dictamines humanos, ellas son las únicas con salvoconducto para “navegar” por un espacio ahora más libre y mucho menos contaminado- es un placer mirar al cielo-. La primavera se extiende día a día, aunque sea posiblemente la menos percibida y disfrutada por los humanos dado el confinamiento. En estos momentos, la vida salvaje representa el envés a la vida de nuestra especie; para nosotros el país o continente objeto es la tienda de la calle que hemos llegado a conocer como nunca y para las aves, “la tienda” es el espacio que ellas elijan libremente a tenor de su alimento y su reproducción- vaya contraste- . Este ejemplar de Águila culebrera se recuperó en el hospital de AMUS y fue liberado a finales del verano del 2019 en el Parque Natural de Cornalvo (Badajoz-Extremadura). El invierno lo pasó entre Mauritania y Senegal (Mapa con la ruta en rojo) y el 15 de Marzo de 2020 inicia su viaje de regreso a Europa (mapa con la ruta en verde). Atravesó el estrecho el 2 de Abril, y cuatro días después llegó a Extremadura, a un lugar en donde posiblemente se instale para criar.
Verificar la total adaptación de un ejemplar intervenido, nos llena de gran satisfacción y justifica la contribución de los centros de recuperación al mantenimiento de la biodiversidad. En estos momentos, a través del equipo de seguimiento de AMUS están monitorizados diversos ejemplares de especies con diferentes grados de amenaza a los que no le perdemos la pista “de la tienda a la que van” ni un solo momento.
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